"Que en el jardín de la dulce cordura seas bombardeado con los cocos que te despiertan" Chögyan Trungpa Rimpoché Esta semana se ha presentado el estudio Seis semanas de confinamiento: Efectos psicológicos en una muestra de niños de infantil y primaria, de las psicólogas Marta Giménez-Dasí de la Universidad Complutense de Madrid, y Laura Quintanilla de la UNED (1) Este estudio en España supone un golpe de aire fresco en medio del vacío y silencio de estudios en la infancia al que solemos estar acostumbradas, donde se reflexiona en abierto y sin tapujos el papel del colegio como un agente no tan beneficioso al que estamos acostumbradxs a escuchar, aunque los resultados encontrados fueran inesperados para ellas. Estos resultados manifiestan en porcentajes, de alguna manera, algunas cuestiones que, quienes defendemos otra manera de educar, venimos diciendo desde hace tiempo ya.
Nada nuevo en otros países. Muy nuevo en España. Quizás sea una de las primeras vías con base científica para una posible apertura a debatir, reflexionar y seguir investigando otras maneras de criar y vivir, cada vez más visibles. Un coco de los que despiertan... en España. Sería sumamente interesante acceder al estudio original (creo que aún no se ha publicado), para conocer todos los parámetros que han tenido en cuenta para su evalución y obtención de sus conclusiones, pero de momento, basándonos en lo que el periódico El País ha publicado en un artículo hace pocos dias (1), el estudio se ha realizado a niñas y niños de edades comprendidas entre los 3 y 10 años, en 2 colegios públicos del noroeste de Madrid. Algunos datos que aparecen son: - 31% dicen que estaban genial en casa - 25% que estaban genial en casa aunque a veces se aburrían - 16% se aburrían - 14% echaban de menos a sus amigos - 9% echaban de menos el colegio - 5 % se sentían nerviosos Además, se sigue señalando, la variable que más ha empeorado, según describen madres y padres, es la motivación al estudio. Mientras que en febrero era un 3,02 sobre 5, ahora es un 2,38 sobre 5. Me pregunto qué puntuación se obtendría si se valorara de nuevo cada 3 meses hasta que terminara este año. Tengo la intuición de que seguiría descendiendo el grado de motivación. Y es que quizás esta motivacion no es del todo intrínsica y auténtica, si no más bien forzada. Cuando forzamod a las niñas y niños a ir al colegio y no se les da más opciones, se les priva de libertad para descubrir y perseguir sus propios intereses y desarrollar la confianza y el sentido de independencia que proviene de crear sus propias actividades y resolver sus propios problemas. Cuando las personas adultas decimos constantemente lo que lo que deben de hacer, tienen pocas oportunidades de descubrir y perseguir lo que ellxs mismos les gusta hacer, esto es, descubrir sus pasiones. También, las autoras perciben que la mayoría de los niños han empeorado su estado psicológico tanto en infantil (55%) como en primaria (64%). Claro, estamos hablando de un estudio realizado en medio de una pandemia, donde en España, concretamente, el confinamiento ha sido uno de los más duros de Europa, con restricciones muy severas que han afectado al espacio y tiempo real de juego libre con el que lxs niños y adolescentes hubieran empezado a reparar los daños ocasionados por el mismo confinamiento. Sabemos que los niveles de ansiedad, depresión e incluso suicidio, guardan una estrecha relación con el declive en la creatividad y el sentido de control interno (falta de control en nuestra propia vida). Peter Gray, profesor de investigación en la facultad de Psicología de la Universidad de Boston, habla en su libro "Free to Learn" sobre cómo las personas que creen que están a cargo de su propio destino tienen menos probabilidades de sentirse ansiosas o deprimidas que aquellas que creen que son víctimas de circunstancias fuera de su control. Podríamos pensar que la sensación de control personal ha aumentado en las últimas décadas. Se han producido progresos reales en nuestra capacidad para prevenir y tratar enfermedades; los viejos prejuicios que limitaban las opciones de las personas debido a su raza, género u orientación sexual han disminuido; y la persona promedio es más rica que en décadas pasadas. Sin embargo, como sigue señalando Peter Gray, los datos indican que la creencia de los jóvenes de que tienen control sobre sus propios destinos ha disminuido drásticamente a lo largo de las últimas décadas. Existe un cuestionario desarrollado por Julien Rotter a finales de la década de 1950 llamado "El Locus interno-externo de la escala de control" El cuestionario consta de 23 pares de declaraciones. Una representa la creencia en un locus interno de control (control por parte de la persona) y la otra representa la creencia en un locus externo de control (control por circunstancias fuera de la persona). Muchos estudios a lo largo de los años han demostrado que las personas que puntuan más hacia un control interno personal en esta escala es más probable que obtengan mejores empleos, disfruten y cuiden de su salud, desempeñen papeles más activos en sus comunidades y que sean menos propensas a sentirse ansiosas o deprimidas. que las persona que sientan que sus decisiones dependen más de factores externos a ellas [2] Hace algunos años, Mihaly Csikszentmihalyi y Jeremy Hunter llevaron a cabo un estudio de felicidad e infelicidad en estudiantes de escuelas públicas de 6o a 12o grado. (3) Cada uno de los 828 participantes, de 33 escuelas diferentes en 12 comunidades diferentes en todo EEUU, llevaba un reloj de pulsera especial durante una semana, programado para proporcionar una señal en momentos aleatorios entre las 7:30 de la manana y las 10:30 de la noche. Cada vez que la señal se apagaba los participantes llenaban un cuestionario indicando dónde estaban, qué estaban haciendo y cuán felices o descontentos estaban en este momento. ¿Y qué paso? Curiosamente los niveles más bajos de felicidad con diferencia ocurrieron cuando los niños estaban en la escuela, y los niveles más altos ocurrieron cuando estaban fuera de la escuela y conversando o jugando con amigxs. El tiempo que pasaba con padres y madres cayó en el medio de la franja. La felicidad promedio aumentó los fines de semana, pero luego se desplomó desde el domingo por la tarde hasta la noche, en previsión de la próxima semana escolar. Estos son algunos estudios de los muchos que hay en EEUU o UK, entre otros, donde la libertad educativa es una realidad legal y regulada y por lo tanto abierta a explorar. Desafortunadamente en España estamos lejos de esta situación, no solo de EEUU sino de muchos de nuestros países vecinos, como UK o Portugal. La inmensa mayoría de los estudios que existen están más enfocados al rendimiento en el area académico (destrezas, motivación o aptitudes) entendiendo sus resultados para una mejora del ambiente escolar. Y esto lo único que hace en realidad, es reforzar aún más mecanismos escolares que perpetúan dinámicas poco saludables para nuestrxs hijxs. Lourdes Gaitán, socióloga miembro de la asociación GSIA, cree que en esta crisis se está fallando al tomar las decisiones sin tener en cuenta niños,niñas y adolescentes. “Estos resultados (respecto al estudio de Giménez-Dasí y Quintanilla) se entienden si se pone la mirada desde el punto de vista de la infancia. La escuela es un sitio donde los niños socializan entre sí, y echan de menos a sus amigos, pero la escuela es también un espacio de tensión, de imposición de autoridad y es el único gran remanente de las instituciones cerradas del siglo XIX, nada más alejado de lo que un niño puede desear. Desde su punto de vista, la escuela, como institución, es una estructura de opresión para los ninos"(1) Por todo ello, la proliferación y visibilización de este tipo de estudios en España supondrían un gran avance para poder llevar a cabo una reflexión profunda sobre nuestro sistema educativo actual, las necesidades reales de nuestrxs hijxs y dirigir la mirada hacia sus auténticas demandas. Estudios como el Giménez-Dasí y Quintanilla, Lourdes Gaitán y otras muchas personas que poco a poco van haciéndose hueco y alzando la voz, colectivos como la Asociación de Libre Educacion ALE, la Asociación GSIA, y otros colectivos más pequeños, como el Colectivo Wayra, que ya están funcionando con menos recursos pero con un gran compromiso, determinación y amor, lanzan atisbos de luz y esperanza. Muchos cocos repletos de inspiración ¡Gracias y gracias! Quizás la pandemia haya puesto de manifiesto, entre otras muchas cuestiones, la urgencia de poner nuestra mirada y dulce cordura en nuestra forma de educar y de criar. De vivir. Porque educar y criar en libertad es posible. Vicky Fernandez Imagen propia Bibliografia: 1.https://elpais.com/educacion/2020-06-21/un-estudio-revela-que-el-estres-se-redujo-durante-el-confinamiento-en-ninos-de-8-a-10-anos-y-solo-un-9-echa-de-menos-el-colegio.html 2. Diversos estudios de Twenge et al. (2004) 3. Twenge, J. et al. (2004). Its beyond my control: A cross-temporal meta-analysis of increasing externality in locus of control, 1960-2002. Personality and Social Psychology Review, 8, 308-319. 4. Csikszentmihalyi, M., & Hunter, J. (2003). Happiness in everyday life: The uses of experience sampling. Journal of Happiness Studies, 4, 185-199. Mas informacion: Asociacion ALE https://www.educacionlibre.org/ Asociacion GSIA https://grupodeinfancia.org/ Colectivo Wayra http://escuelalibrewayra.es/
1 Comentario
Rodolfo
28/6/2020 01:06:15 am
Muy buen artículo! Creo que todo esto de la pandemia es parte del proceso, ojalá que más gente tenga la misma mirada tan profunda y objetiva como la tienes tu. Gracias por compartir.
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